El presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció que su país ha ganado la carrera mundial por registrar la primera vacuna anti-COVID-19. ¿Su nombre? Gam-COVID-Vac.
“Se ha registrado, por primera vez en el mundo, una vacuna contra el nuevo coronavirus”, dijo el jefe del Kremlin en una reunión con el Gabinete de Ministros, transmitida por la televisión rusa.
El mandatario indicó que tiene conocimiento de que la vacuna registrada en el Ministerio de Sanidad de Rusia es “suficientemente eficaz, crea una inmunidad estable” y -subrayó- “ha superado todas la verificaciones necesarias”.
Es más, el mismo Putin reveló que una de sus hijas participó en los ensayos clínicos de la vacuna, elaborada por el Centro de Epidemiología y Microbiología Gamaleya.
La vacuna fue registrada con el nombre de Gam-COVID-Vac, según un comunicado de Sanidad, y permite una inmunidad prolongada al inyectarse dos veces.
“La vacuna (en los ensayos clínicos) ha mostrado ser segura y de gran eficacia. Todos los voluntarios desarrollaron elevados niveles de anticuerpos ante la COVID-19 y a ninguno de ellos se les detectaron complicaciones graves de inmunización”, dijo a su vez el ministro de Sanidad, Mijaíl Murashko.
La nota de prensa de Sanidad señala que “la experiencia del uso de vacunas vectorizadas (al inocularse dos veces) muestra que la inmunidad se conserva hasta dos años” y precisa que la Gam-COVID-Vac no contiene componentes del nuevo coronavirus y que se ensayó en dos grupos de 38 voluntarios cada uno.
La OMS recibió con cautela la noticia. Señaló que la rusa, como el resto de las que se desarrollan, deberá seguir los trámites de precalificación y revisión que marca el organismo.