El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó, por 415 votos a favor, uno en contra y cero abstenciones, aumentar de 60 a 65 años de prisión como pena máxima a quien cometa el delito de feminicidio.
El dictamen, que se turnó al Senado para su análisis, prevé reformas a los artículos 25, 261 y 325 del Código Penal Federal, en las que se propone también aumentar de ocho a 10 años de prisión a los servidores públicos que entorpezcan las investigaciones de este delito.
Además de que, quien cometa el delito de abuso sexual en una persona menor de 15 años de edad o en una persona que no tenga la capacidad de comprender el significado del hecho, se le impondrá una pena de 10 a 18 años de prisión.
Durante la sesión ordinaria, con pañuelos morados y zapatillas rojas, las y los legisladores protestaron contra los feminicidios de Ingrid Escamilla y Fátima.
A través de un acuerdo de la Junta de Coordinación Política y la Mesa Directiva de la Cámara Baja, las y los diputados hicieron un llamado a las autoridades de seguridad y de procuración de justicia para que garanticen el acceso y derecho a una vida libre de violencia para las mujeres.
Solicitaron actualizar los protocolos de investigación y mejorar las capacidades de los policías encargados de las indagatorias por denuncias de violencia contra niñas y mujeres.
Fuente: ElEconomista