Kantunilkín.- A los 61 años, la señora Margarita Canul Baas descubrió que tiene un don, que a lo largo de 25 años le ha permitido ayudar a muchas mujeres de Cancún, Playa del Carmen y de las comunidades del municipio a llevar sus embarazos a feliz término: “sobadora de vientres”.
Hoy, con 86 años, recuerda que las
primeras mujeres a las que sobó el vientre fueron sus hijas, luego de que el
doctor les dijo que el bebé estaba en mala posición. Con sus manos corrigió el
problema y sus nietos nacieron sin complicación.
Hoy, doña Margarita recibe en su casa a
mujeres embarazadas que llegan desde diversos puntos del Estado y del buscando
su ayuda, una “tallada” que les ayude a corregir la mala posición de sus bebés.
“Yo no soy partera. Sólo aprendí a sobar
a las mujeres, que ahora me buscan cuando la posición del bebé no es la correcta
y que por eso pueden tener complicaciones al momento de nacer. Afortunadamente,
luego de que las atiendo, muchas vienen y me dicen que sus niños nacieron sin
complicaciones”, explica.
Canul Baas dijo que lleva 25 años
sobando a las mujeres embarazadas “empecé con mis hijas cuando el doctor les
dijo que está mal la posición de su bebe, sin imaginar que ahora me busquen en
mi casa. No cobro por esto, sólo recibo lo que me dejan voluntariamente”.
Aunque sus hijas trataron de animarla
para que atendiera partos, dijo que no lo hizo porque “siento que eso es otro
nivel. No tengo los conocimientos o la preparación, sólo puedo sobar y componer
la posición del bebé cuando está atravesado en el vientre de la mamá para que
tenga un parto sin complicaciones”.