Vivaldisiempre se ha perfilado como uno de los navegadores alternativos más interesantes; está orientado especialmente al tipo de usuario power user, el que quiere mucho control, mucha personalización y muchos extras.
En ese aspecto nunca ha defraudado sino todo lo contrario, con cada versión son más las funciones únicas que este navegador apila para ser una pequeña navaja suiza de productividad, y con la versión 3.1 han ido tan lejos como a incluir un gestor de notas que está más cerca de ser todo un procesador de texto que una simple función de apuntes.
Entre sus novedades están mejoras en la velocidad del navegador, no solo logrando un inicio algo más rápido, sino mejor gestión de pestañas.
Además de esto se han añadido nuevos menús configurables, es decir, ahora puedes mover tus acciones más utilizadas a la parte superior del menú principal (el Botón Vivaldi).
Sin embargo, la función estrella de esta versión es sin dudas el gestor de notas, que aunque se llame así es todo un editor de texto con soporte Markdown y texto enriquecido. Vivaldi ya permitía tomar notas en la barra lateral, pero ahora puedes usar toda la pantalla para escribir y añadir imágenes como adjuntos arrastrando directo desde la web o desde tu disco.
Si bien hay soporte para dar formato al texto con las herramientas incluidas o usando el lenguaje de marcado Markdown, también puedes usarlo como un editor WYSIWYG, es decir: edición de exactamente lo que ves.