Frente a sus dislates que le han
generado polémica y críticas, Sergio Mayer Bretón, diputado de Morena, minimiza
sus errores, porque no le han costado al erario ni ha dañado a nadie.
“¿Qué errores son? Confundir el Palacio de Bellas Artes con el Palacio Nacional. ¡Ay que gran error! Estoy tranquilo porque conozco lo que es uno y otro. Si me dijeras que estos errores han causado daño al erario, que han perjudicado a un grupo de personas… pero no”.
El legislador rechaza que sus errores lo
definan y argumenta a la defensiva: “Quién no comete errores. Son los que no lo
intentan, los que no hacen cosas, los que tienen miedo al éxito, los que se
quedan sentados”.
El exdesnudista y excantante de la
agrupación Garibaldi, con la que inició su carrera artística en los 80, declara
que le gusta la lectura y que en estos momentos está leyendo: “La Sombra de
Caudillo”, de Martín Luis Guzmán, que recomienda debe ser leído por todos,
además de la novela “Santa”, de Federico Gamboa.
El presidente de la Comisión de Cultura
de la Cámara de Diputados, cargó que aclara que no le fue regalado, da su propia
versión de la diferencia entre cultura y arte: “Pues a mi me parece que arte es
una de las expresiones de la cultura, o sea, la cultura son todas las
expresiones que tenemos como sociedad, como pueblo, todo lo que… la comida,
las expresiones, lo textil, lo gastronómico”.
Y dentro del arte, abundó, están también
diferentes expresiones que puede ser el baile, la danza, la pintura, y el arte
está dentro de nuestras expresiones culturales que viene siendo la cultura.
“Entonces esa es la diferencia que el arte
es parte de la cultura, y dentro del arte están todas las expresiones
culturales o artísticas”.
En ese sentido, Mayer Bretón se declara
admirador de los grupos de danza. “Hay un grupo contemporáneo que es de Tania
Pérez Salas, que acaba de estar en la UNAM. Yo creo que es de las cosas más
bellas que he visto de baile contemporáneo”. (Cabe señalar que no existe el
baile contemporáneo, sino la danza contemporánea).
“Mis hijas hacen ballet, y las llevó al
ballet clásico… pero ese show de Tania Pérez Salas es de las mejores
coreografías que tenemos en México… Una de las mejores bailarinas del mundo
es Elisa Carrillo, primera bailarina que me parece está en Berlín, que le
acaban de dar un reconocimiento a nivel internacional, es como recibir un
Oscar”. (Cabe señalar que se equivoca el diputado, pues quien recibió el premio
considerado el Oscar de la danza fue Issac Hernández, el Benois de la Danse al
mejor bailarín, en 2018).
A sus 52 años, Sergio Mayer se declara
feliz por estar en el Legislativo y ser presidente de la Comisión de Cultura,
que dice que no le fue regalada, sino que la trabajó, y cabildeó con sus
compañeros de bancada para obtener los votos necesarios.
Casado con tres hijos, declara estar
comprometido al cien por ciento con su trabajo legislativo. “Tome la decisión
de trabajar por mi país, porque estoy convencido que México necesita gente
comprometida y yo así estoy, digan lo que digan, comenten lo que comenten”,
enfatizó.
Acusó la existencia de un grupo que
magnifica cualquier resbalón que tiene para denostar y criticar, porque no le
pueden encontrar nada.
“No soy corrupto, no soy alcohólico, ni
mujeriego, ni he cometido fraude”, aseguró. Admitió que para estar en la
política se tiene que tener la piel gruesa, “porque cualquier cosa que digo la
magnifican, la quieren distorsionar. No me preocupa, dijiste leche por meche,
¡hay! ¡Qué gran error!”, ironiza Mayer Bretón, quien se levanta todos los días
a las 6:15 de la mañana, para llevar a sus hijos a la escuela.
Reprocha que sean nota sus errores,
cuando hay otros que se mientan la madre, que se avientan sillas, y ahí no pasa
nada.
De niño soñaba con ser deportista o
artista, pero nunca tuvo el apoyo, pues sus orígenes son humildes, vivió en
Iztapalapa, en una colonia popular que en ese entonces eran comunes los
basureros.
“No teníamos ni contactos ni dinero
mucho menos. Vivíamos por Cabeza de Juárez, que en aquel tiempo eran
basureros”, subrayó.
Se define como un luchador de la vida
con objetivos, que ha logrado.
Sus primeros estudios los hizo en
escuelas públicas y tiene la licenciatura en Administración de Empresas por la
Universidad Iberoamericana, y actualmente estudia una maestría de Derecho
comparado.
Su transición de actor a la política la
presume como algo natural.
“Siendo actor de alguna manera haces y
estás en política. Cuando te das cuenta que eres una figura pública y de que
puedes tener impacto social es cuando empiezas hacer política”.
El actor, productor, cantante y ahora
diputado, reconoce que no milita en Morena, pero cree en el proyecto del
presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Yo fui a tocar puertas a Morena. Y
Andrés -Manuel- López Beltrán me dijo sí, todo mundo es bienvenido aquí, que
bueno que seas actor pero aquí tienes que pasar un proceso interno en donde
tuve que ser aceptado”.
Presume que su diputación la ganó con
114 mil votos y no recibió ningún centavo público para su campaña, “todo lo
hice con un grupo de jóvenes, si acaso me gasté 80 mil pesos en mi campaña”.
Sergio Mayer concluye que seguirá
trabajando con la bancada de Morena para darle los instrumentos al Presidente
de la República para lograr los cambios que prometió en campaña.